Alimentos que repiten su sabor durante la digestión
Posiblemente, tras la ingesta de ciertos alimentos como el ajo o el chorizo, se tenga la sensación de que el sabor de estos productos “se repiten” en el paladar. Pero ¿a qué se debe que el sabor permanezca en las papilas gustativas? Existen varios factores que podrían explicar este hecho: podría ser consecuencia del reflujo gastroesofágico o también podría evidenciar que hay un exceso de alimentos ácidos o procesados en la dieta.
“Repetirse” puede tener un doble sentido: por un lado por el olor/sabor de ciertos alimentos posterior a la ingesta o bien sensación de náuseas o regurgitación.
¿Cuáles son los alimentos que dan la sensación de que se repiten?
Las papilas gustativas se encargan de percibir el sabor de los alimentos cuando se ingieren. Sin embargo, en ocasiones, es posible que el gusto permanezca en las papilas, aun cuando ha pasado un tiempo de la ingesta. Esta sobreestimulación se debe a diferentes causas como son:
- El reflujo gastroesofágico puede producirse por algunas patologías como la hernia de hiato, pero realmente su origen es multifactorial y no necesariamente está asociado a una dolencia. En estos casos, el proceso digestivo se invierte, de forma que ciertos alimentos previamente ingeridos o ácidos estomacales vuelven o retroceden a la garganta. Por ese motivo, se puede percibir que los sabores de los alimentos se repiten en el paladar.
- Los elementos químicos propios de ciertos alimentos combinados con los ácidos del proceso digestivo desprenden ciertos gases (compuestos volátiles sulfurados). La forma de eliminar estos gases es a través de la boca. Al hacerlo, las papilas gustativas se estimulan, provocando esa sensación de que los alimentos se repiten. Los alimentos que más favorecen este tipo de gases son los ácidos, los alimentos procesados, como los embutidos y algunos vegetales y frutas, sin embargo, tanto la fruta como la verdura son muy beneficiosos e importantes para mantener un estilo de vida saludable. En caso de que alguno no nos sentase bien, es recomendable reducir o sustituir su consumo, pero en ningún caso eliminar este grupo de alimentos. A grandes rasgos, los alimentos o productos cuyos sabores pueden repetirse tras consumirlos son:
- Cebolla
- Ajo
- Pimientos
- Pepino
- Melón
- Gazpacho
- Mandarina
- Naranja
- Kiwi
- Café
- Salchichón
- Chorizo
- Morcilla
- Bollería industrial
Esta lista contiene lo más comunes, pero no se deben limitar o evitar todos ellos, sino que se debe ir probando de forma individual y limitar el consumo sólo de aquellos que sea necesario.
Otro factor que también guarda relación con la aparición de esos gases es la forma de elaborar los platos. Por ejemplo, si los alimentos se consumen guisados o estofados. También porque estas cocciones suelen venir acompañadas de alimentos con mayor contenido de grasa (tocino, chorizo, etc.). Si realizamos guisos obviando estos alimentos, se puede consumir por cocción lenta y dejando enfriar en el frigorífico el día anterior. Al día siguiente se formará una capa de grasa superior que podemos retirar para disminuir los síntomas.
¿Qué hacer si los alimentos repiten?
En caso de percibir que los alimentos y su sabor “se repiten” con frecuencia, es necesario acudir a un profesional médico. Sin embargo, existe una serie de hábitos que ayudan a prevenir la aparición de ese malestar. Algunos de ellos son:
- Reducir el consumo de alimentos que puedan provocar esos gases. Resulta muy útil en este caso realizar un registro/diario de alimentos que han sentado mal, apuntando sintomatología en escala 1 – 10.
- Optar por formas de cocción suaves: horneado, hervido, papillote, microondas. Las verduras, no consumirlas crudas.
- No consumir alimentos o platos copiosos, es decir, abundantes o que den la sensación de pesadez. Ni grandes cantidades.
- Evitar el exceso de grasas.
- No abusar del uso de especias en la elaboración de los alimentos. Sobre todo, evitar especias picantes: pimienta, pimentón, curry, guindilla, etc.
- Bebidas como el alcohol o el café pueden agudizar la irritación y, por tanto, incrementar la sensación de que se repiten los alimentos. Porque provocan aumento de acidez en el estómago.
- A mayor cantidad de comida ingerida, el estómago estará lleno durante más tiempo y se producirá mayor porcentaje de reflujo. Evitar, por tanto, comidas copiosas para reducir el volumen de alimentos por toma. Ingestas más pequeñas y frecuentes, según sensación de hambre. No llegar hasta el límite de saciedad.
- Masticar bien los alimentos.
- Evitar comer muy deprisa. Es fundamental junto a una masticación correcta. Normalmente se tiende a infravalorar su importancia, por lo que hay que insistir.
- Realizar alguna actividad física, como andar.
- Adecuada gestión del estrés o la ansiedad.
En resumen, es suficiente con dieta saludable y evitando los alimentos que sienten mal.
Recuerda:
- Es posible que el sabor de los alimentos permanezca en las papilas gustativas después de la ingesta.
- El reflujo gastroesofágico o los gases emitidos de ciertos alimentos son algunos de los motivos que explican este hecho.
- Para evitar que el sabor de los alimentos permanezca, se recomienda hacer cambios en la dieta, en la forma de elaborar los alimentos o realizar actividad física.
