¿Cuáles son las alergias más comunes?

Una alergia es una respuesta anómala inflamatoria de base inmunológica que tiene lugar en algunas personas genéticamente predispuestas, pudiendo manifestarse frente al polen de un árbol, frente a un alimento, medicamento o al veneno de un insecto. Las sustancias que provocan reacciones alérgicas comúnmente se denominan alérgenos.

Se estima que en nuestro país hasta el 20-25% de la población puede ser alérgica. Algunas alergias comunes de la edad pediátrica (como por ejemplo alimentos como la leche o el huevo) suelen mejorar a medida que el niño crece, aunque muchas duran toda la vida. Por supuesto, algunas alergias a determinados alérgenos pueden desarrollarse en la edad adulta (aún habiendo sido tolerantes a los mismos previamente) predominando generalmente en los adultos jóvenes.

Existen muchos grados de severidad de enfermedades alérgicas. Pese a que tener una alergia puede resultar molesto y un inconveniente ante las actividades diarias, en muchas ocasiones no son graves y tras un buen diagnóstico y unas simples recomendaciones pueden controlarse fácilmente.

Ácaros del polvo doméstico

Una de las alergias más comunes son a los ácaros del polvo, que son pequeños arácnidos que se encuentran en el polvo doméstico. Se puede limitar la cantidad de ácaros en el hogar con estos pasos:

• Evitar las alfombras y los muebles tapizados.
• Colocar persianas que puedan limpiarse con facilidad.
• Limpiar cojines, cortinas y muebles tapizados con regularidad, ya sea mediante lavado a alta temperatura o con un aspirador.
• Usar fundas para colchones, edredones y almohadas.
• Comprar una aspiradora equipada con un filtro de aire de partículas de alta eficiencia, ya que puede atrapar más ácaros del polvo que las aspiradoras normales.
• Limpiar regularmente las superficies con un paño húmedo y limpio.

 

Alergias a mascotas, también comunes en personas

Al contrario de lo que se cree popularmente, no es el pelo de las mascotas lo que provoca una reacción alérgica. En cambio, son las escamas de su piel muerta, la saliva u orina seca de estos animales.

Algunos consejos para limitar el efecto de la alergia en mascotas son:

• Mantener a las mascotas en el exterior tanto como sea posible o limitarlas a un área particular de la casa, preferiblemente sin alfombras.
• No permitir mascotas en las habitaciones.
• Lavarlas regularmente, aproximadamente una vez cada dos semanas.
• Lavar regularmente los cojines donde se acuestan las mascotas.
• Abrir ventanas el mayor tiempo posible.
• Si se recibe a alguien alérgico en casa, es conveniente no pasar el polvo o la aspiradora el mismo día de la visita, ya que esto agitará los alérgenos en el aire.
• Tomar un medicamento antihistamínico aproximadamente una hora antes de entrar a una casa habitada por mascotas también puede ayudar a reducir los síntomas.

 

Las alergias al polen también son comunes

Las alergias al polen se producen cuando los árboles y la hierba liberan esta sustancia en el aire. En biología, este efecto se conoce como polinización. Muchas plantas polinizan en diferentes épocas del año, por lo que los meses en los que se sufra su alergia dependerán del tipo de polen al que sea alérgico. En general, las personas se ven afectadas durante los meses de invierno (Cupresáceas: Ciprés, Arizónica), la primavera (Olivo y Gramíneas) y el verano (malezas como la Salsola).

Especialmente durante estos periodos, se recomienda a los alérgicos:

• Evitar secar la ropa y la ropa de cama al aire libre cuando los niveles de polen sean altos.
• Usar gafas de sol para proteger los ojos, o incluso mascarillas para las vías respiratorias.
• Mantener puertas y ventanas cerradas cuando sea posible.
• Ducharse y cambiarse de ropa tras pasar el día fuera.
• Evitar las áreas cubiertas de hierba, como parques y campos, particularmente durante las primeras horas de la mañana, la tarde o la noche, cuando la distribución del polen es más alta.
• Evitar realizar actividades de jardinería, como cortar el césped.

 

Recuerda:

• Las alergias pueden aparecer en cualquier momento de la vida, aún habiendo sido tolerante a dicha sustancia previamente.
• Conviene no tener muebles tapizados o alfombras si se tiene alergia a los ácaros del polvo.
• El pelo de los animales no es la causa de las alergias relacionadas con éstos.