Dengue: qué es, síntomas, tratamiento y prevención

Según la Organización Mundial de la Salud, en los últimos 20 años se ha multiplicado por 8 el número de casos notificados de dengue a nivel mundial. Transmitido principalmente por mosquitos, la infección se presenta de forma asintomática entre el 40 y el 80% de las personas infectadas. Sin embargo, las infecciones sintomáticas pueden comportar enfermedad grave e incluso la muerte.

 

¿Qué es el dengue?

El dengue es una enfermedad viral trasmitida principalmente por mosquitos, en concreto por la picadura del mosquito hembra del género Aedes (mosquito tigre). Otras vías de transmisión documentadas en la evidencia científica son:

• Transmisión vertical (es decir, de la madre a su hijo durante la gestación o el parto)
• Transfusión sanguínea.
• Trasplante.

Tradicionalmente, esta enfermedad se encuentra presente principalmente en América, Asia, al este del Mediterráneo, en el Pacifico Occidental y África. Según datos del Instituto de Salud Carlos III, desde 2018 se han detectado casos autóctonos de dengue en nuestro país. Este hecho se debe a la presencia del mosquito Tigre competentes para la transmisión en áreas como la costa del Mediterráneo, Andalucía o zonas del interior peninsular (Madrid, País Vasco, Extremadura y Aragón).

 

Síntomas del dengue

La infección del dengue se caracteriza por la variabilidad del cuadro clínico. Es decir, no todas las personas desarrollan síntomas y cuando lo hacen, no son de la misma manera. Se estima que hasta en el 80% de los casos, las personas desconocen que tienen la enfermedad ya que permanecen asintomáticas.

En aquellos pacientes que presentan síntomas, los signos se manifiestan entre tres días y dos semanas después de la picadura del mosquito. Una vez el paciente presenta síntomas, la duración de estos es variable. La OMS cataloga a los pacientes sintomáticos en dos grandes grupos:

• Fiebre por dengue, cuyos síntomas son similares a la gripe.
• Fiebre por dengue grave, tradicionalmente llamado dengue hemorrágico/síndrome de shock por dengue, el cual puede comportar hemorragias graves, o daño orgánico importante

 

Fiebre por Dengue

Por lo general, entre aquellos que presentan síntomas, el signo más habitual del dengue es la fiebre. La fiebre provocada por el dengue es elevada, en torno a los 40º. Además, las personas afectadas por el dengue suelen presentar, al menos, dos de los síntomas siguientes:

• Cefalea o dolor de cabeza.
• Dolor detrás de los ojos.
• Dolor en los músculos o articulaciones.
• Mareos o náuseas.
• Vómitos.
• Inflamación de los ganglios linfáticos.
• Sarpullido.

 

Fiebre por dengue grave o dengue hemorrágico

Aunque únicamente el 5% de los infectados desarrolla enfermedad grave, es necesario una observación adecuada ya que puede resultar mortal en estos casos. Por este motivo, la OMS insta a los profesionales sociosanitarios a prestar atención especial a estos pacientes. La fiebre por dengue grave suele presentarse entre 3 y siete días tras la aparición de los primeros síntomas. Es necesario prestar atención a los siguientes síntomas:

• Dolor abdominal.
• Los vómitos continúan y se producen con sangre.
• Alteración en la respiración.
• Sangrado, en las encías o por la vía nasal, por ejemplo.
• Cansancio extremo.
• Nerviosismo.

 

¿Cómo se puede prevenir la enfermedad del dengue?

Actualmente no se cuenta con un tratamiento específico para el dengue, pero sí para sus síntomas. En estos momentos se está investigando la efectividad y seguridad de diferentes vacunas frente a esta enfermedad. Por lo que la línea de abordaje se sustenta principalmente en la prevención y, en caso de contraer la enfermedad, en minimizar y controlar la evolución de los síntomas.
En lo que respecta a la prevención individual, se recomienda la puesta en marcha de medidas individuales como son:

• Utilizar mosquiteras.
• Uso de repelentes.
• En cuanto a la ropa, fomentar el uso de prendas que cubran el cuerpo como pantalones o camisetas largos, calcetines y zapatos.

En relación con las poblaciones de mosquitos, las principales medidas se centran en acabar con hábitats que propicien su reproducción, como son las aguas estancadas. Entre las principales recomendaciones están la fumigación y limpiar áreas u objetos que propicien la acumulación de agua.

 

Recuerda

• El dengue es una enfermedad infecciosa transmitida principalmente por mosquitos, aunque también existen otras vías de transmisión.
• Dado el incremento de casos en los últimos años y la ausencia de vacuna o tratamiento específico, es fundamental desarrollar iniciativas centradas en su prevención.
• Ya no es una enfermedad “tropical”: en España, la mayoría de los casos de dengue son importados, sin embargo, desde 2018 se están empezando a observar los primeros casos autóctonos.
• Entre 4 y 8 de cada 10 casos permanecen asintomáticos. Aquellos que presentan síntomas, principalmente son similares a los de la gripe.
• El dengue puede ser fatal, por lo que es importante asumir que se trata de una enfermedad potencial en caso de vivir o viajar a áreas donde se produce su transmisión por mosquitos.