Melasma: qué es, por qué aparece y 5 formas de prevenirlo
La aparición de manchas en la piel se puede deber a diversas causas, entre ellas, el melasma. También conocido con el nombre de máscara del embarazo o cloasma, consiste en la aparición de manchas en la zona facial, principalmente en la frente, mejillas, nariz o labio superior.
Estas manchas son de tonos marrones, claros u oscuros y se caracterizan por su aparición simétrica ambos lados de la cara. Aunque puede afectar a ambos sexos, se da con mayor frecuencia en mujeres.
Causas de la aparición de melasma
También denominada hipermelanosis, el melasma se origina por un aumento de la melanina y posee una serie de condicionantes que aumentan su aparición. Entre estos encontramos:
- Factores hereditarios
- Fototipo de piel. El melasma se suele presentar con mayor frecuencia en personas que tienen un tipo de piel más oscura en comparación con aquellas que tienen fototipo más bajo.
- La exposición solar también favorece la aparición de melasma, sobre todo si no se aplica la protección solar adecuada. Por este motivo, verano suele ser la estación del año en la que con mayor frecuencia aparecen estas manchas.
- Los cambios hormonales constituyen otra de las principales causas. De hecho, el melasma aparece con mayor frecuencia en mujeres jóvenes.
- Estar sometido a tratamientos como los anticonceptivos orales o fármacos fotosensibles también puede favorecer la aparición de esta patología cutánea.
- Embarazo. Se estima que 1 de cada 10 mujeres embarazadas desarrollan melasma durante la gestación, de ahí que esta afección también sea conocida como máscara del embarazo.
- Problemas de tiroides
Cómo identificar correctamente el melasma
La hiperpigmentación es el principal síntoma del melasma. Al principio estas manchas suelen ser pequeñas, pero aumentan de tamaño con el paso del tiempo. Suelen ser uniformes y planas, lo que constituye la principal diferencia con los lunares abultados.
La zona en la que se presentan estas manchas, además del color marrón característico, también puede sugerirnos que nos encontramos ante un caso. Por lo general, se suelen dar con mayor frecuencia en zonas expuestas al sol. Afecta en su gran mayoría al centro de la cara (frente, nariz, mentón, labio superior y mejillas), aunque también pueden aparecer en la zona de la mandíbula y extenderse al cuello y brazos.
En caso de advertir la presencia de estas manchas es necesario acudir a un dermatólogo, que confirmará el diagnóstico tras realizar una exploración con la luz de Wood. Además, esta prueba permitirá también detectar su tipo:
- Melasma epidérmico, que afecta a la capa superficial de la piel.
- Melasma dérmico, el cual es propio de las capas más profundas. En este tipo las manchas suelen tener una tonalidad azul grisácea.
- Un tercer tipo es el combinado, en el cual las manchas tienen tonos marrones y grises.
Tratamiento y prevención de manchas en la piel
El melasma no presenta mayor gravedad, siendo más bien un problema estético, por lo que su tratamiento principal se basa en la prevención.
Entre las principales medidas que permiten evitar la aparición de estas manchas están:
- El uso de protección solar adecuada durante todo el año. En este sentido se trata de seguir los consejos habituales.
- El tipo de protector ha de ser preferiblemente de factor elevado.
- Evitar exponerse al sol las horas durante las horas en las que se alcanzan los picos de radiación solar, entre las 12 y las 16 horas.
- Utilizar sombreros.
El uso de bases de maquillaje nos permite disimular la presencia de estas manchas.
En casos más graves, hay que acudir a un dermatólogo para que evalúe nuestro caso en particular y establezca el abordaje adecuado, bien sea mediante la prescripción de cremas específicas o procedimientos quirúrgicos.
Recuerda
- El melasma es una afección cutánea que consiste en la aparición de manchas con tonos marrones en la cara, principalmente en las mejillas, la nariz, la frente y el labio superior.
- No se trata de una enfermedad grave y suele afectar principalmente a mujeres.
- Entre sus principales causas destacan la exposición al sol y los cambios hormonales.
- El principal tratamiento del melasma se basa en su prevención, principalmente en el uso de cremas solares que protejan las zonas de la cara expuestas al sol.
